Sé que no es una telenovela, y por eso no voy a seguir el modelo de ficha que solía utilizar para comentar las telenovelas. Me resito a cerrar el portal pero también deciros que el poco tiempo que miro televisión, se aleja últimamente del formato telenovela.
He visto las dos temporadas de Narcos, y tenía que escribir sobre ella. Es una trepidante seria hecha con una calidad excelente. En sus dos primeras temporadas escoge a uno de los narcotraficantes más conocidos y peligrosos de la historia: Pablo Escobar.
Nunca me apeteció empezar las series que en Colombia le hicieron a este temible personaje, así que no se porque empecé a ver Narcos en Netflix (bueno sí, os lo cuento más tarde). La he visto en original, y os lo aconsejo porque la versión doblada con ese latino neutro que se te mete en el cerebro y te taladra. ¿ Quien del mundo latino habla así? Es inaguntable.
Al principio, me costo adaptarme al actor brasileño Wagner Moura, principalmente porque si había tantos actores colombianos en la serie como habían escogido un brasileño que casi no sabía hablar español. Con el paso de los episodios no veo otro actor que pudiera hacer ese personaje con esa pasión y esa dedicación, y ha conseguido bastante bien el acento paisa, tarea nada fácil.Si bien Wagner Moura hace muy bien su trabajo el personaje de Escobar me resulta repugnante. Ayer vi el último capítulo, y me quedó un vacio en el cuerpo, como de orfandad. !! Qué haré ahora sin Narcos un año!!!!
Como os decía, no estaba muy seguro de empezar la serie, supongo que mi pareja quisiera verla y así poder compartir el ratito de televisión semanal del que disponemos fue que me decidiera. Cuando ví que salía Juan Pablo Raba, Manolo Cardona, Cristina Umaña, Juan Pablo Espinosa, Juan Pablo Shuk y otros actores y actrices de telenovela como Damián Alcazar, Bruno Bichir, Jon Eckel etc… pues creo que ya fue los motivos decisivos para que me quedará prendada de la serie. Sobre todo por Raba, que me encanta como primo canalla y sinvirgÁ¼enza con un vestuario hortera de la época espantoso que lleva con una elegancia que pocos lo consiguen.
Esta segunda temporada, he agradecido que le dieran más protagonismo a Pedro Pascal, que ya en la primera temporada me empezó a enamorar pero Cardona y Raba me lo eclipsaban (no puedo atender a tantos a la vez), así que SPOILER al desaperecer estos dos colombianos en la segunda temporada toda mi atención se centró en Javier Peña (Pedro Pascal), que actorazo, por Dios. He leido por ahí que es chileno pero vive en Estados Unidos, no voy a decir que le eche en falta en las teleseries chilenas que sabéis que son de las que más me gustan por tener actores tan versátiles, pero si voy a indagar más donde verlo. Ya sé, me diréis que en Juego de tronos, pero es que esa me sa una pereza horrorosa así que decirme otra plis.
Y después de tantas banalidades, me pongo seria. Creo que lo bueno de Narcos es saber ficcionar una realidad muy trágica y dramatica y que sin duda marcó una generación y a un país. El personaje podía ser idolatrado por muchos por populista pero odiado por muchos más por ser un terrorista que atentó contra civiles. La serie podia haber sido un documental, o un sinfin de drama indigerible pero se convierte en un docu-drama con rendijas para la reflexión contado desde una Á²ptica americana sin que estos sean los héroes. En algunos episodios podemos ver que la serie tiene hasta tintes líricos, o que algunos de los diálogos podrían haberse pronunciado de verdad.
La recomiendo para los devoradores de series, que se que son muchos. Ahora a esperar la tercera temporada que te deja una esperanza brutal sobretodo porque Pedro Pascal va a coger la batuta.
Se me olvidaba, una preciosidad la canción de la entrada» Tuyo » de Rodrigo Amarante